El arambalazo

Fue ese el subtitulo que José Ignacio Lopez Vigil, utiliza en su libro “Las mil historias de radio venceremos”, donde relata como el día 15 de septiembre de 1985 se da un ataque en las montañas de oriente (Arambala, Morazán) entre guerrilleros y militares. Donde el piloto del helicóptero Hughes 500 o la avispita como le llamaban, recibe la orden de apoyar el combate que se vivía en la zona. Esa mañana del enfrentamiento, el piloto se vio obligado en realizar maniobras casi a ras del suelo contra las ametralladoras M-60 de la guerilla. En el momento del combate, la radio venceremos por su rastreo de las comunicaciones, logra captar la comunicación entre el piloto y la base aérea, escuchándose decir en el momento del enfrentamiento:“Me quebraron el culo” -palabras del piloto-, y efectivamente fue así, no por el hecho de haberlo derribado sino porque fue ahí donde le atravesó la bala, que lo obliga a realizar un aterrizaje de emergencia en la base militar más cercana ubicada en San Miguel. 

Este año se cumplen ya 30 años de aquel suceso. Y curiosamente, fue en estos días que me encontré con José Ignacio Lopez Vigil en una reunión en San Salvador. Al acercarme a él y mostrarle el libro verde que llevaba en mi bolso, se sorprendio diciendome: ¡Vaya cuanto tiempo! ¿como es que todavía andas leyendo esas historias? Le comente de mi tío y su historia el arambalazo. Y que así como él también me ha entrado la manía en trazar historias y memorias en papel. Se alegro tanto, que me termino alargando una taza de café y pasamos una hora charlando de mil y una historias mas. Hasta que disculpandose por tener que retirarse, me arrebato de un jalon el libro de mi mano y veo que escribe un cierto garabato. Nuestro encuentro termino con un fraterno abrazo e intercambio de correo. Ya luego camino a casa, voy ojeando el garabato del escritor. Y voy notando como puso en su dedicatoria un nombre por error.

Con eterno amor y cariño a mi tío, padrino, y teniente aviador Jaime Ramón Orlando Olivo Avila.